¿Te sueles asustar mucho o estresar (o crees que lo harías) en estas situaciones?:
- Ante la posibilidad de contagiarte del coronavirus o de que se contagien tus hijos y familiares
- Cuando te encuentras atrapada en un atasco de tráfico por las mañanas
- Al esperar que reparen tu ordenador para continuar con un trabajo que tienes que entregar en breve
- Si tu jefe te pide un informe sobre un tema que no dominas
Si has respondido que sí te estresas en todas o la mayoría de estas situaciones es seguro que tu sensibilidad a la sensación de falta de control es alta.
Por tanto, es muy fácil que te estreses por cualquier circunstancia o situación en la que sientas que no tienes el control o que te resulta casi imposible controlarla.
rasgos de las personas más sensibles a la sensación de falta de control
Sentir falta de control, aunque sea mínimamente, ante una situación o circunstancia concreta es suficiente para que tu cerebro active una respuesta de estrés de forma inmediata. Incluso aunque solo estés pensando en esa circunstancia. Pues el cerebro no distingue entre algo real y algo imaginado a la hora de activar una respuesta de estrés.
Todos podemos sufrir estrés causado por la sensación de falta de control en algún momento y situación. Pero hay ciertas personas con determinados rasgos de personalidad y carácter que son, por ellos, más sensibles a este factor psicológico.
El estrés causado por la sensación de falta de control se suele dar con más frecuencia en personas con rasgos de ambición, exigentes, impacientes, con cierto grado de hostilidad, cierto perfeccionismo y rigidez, a las que les gusta tener todo bajo control y a las que les cuesta delegar.
También suele darse en personas inseguras y con baja autoestima aunque en estos casos se produce a la inversa. Es decir, por ¡exceso de control! según ha observado en sus investigaciones la neurocientífica, experta en estrés, Sonia Lupien.
Una persona con baja autoestima puede sentirse fácilmente abrumada y sobrepasada por una situación en la que recaiga sobre ella un exceso de responsabilidad o de control. Y generar, en consecuencia, una respuesta de estrés.
si te estresa la sensación de falta de control: ¿cuál es tu miedo?
Detrás de esta sensación de falta de control se puede intuir un tipo de miedo latente.
Es el miedo a dejarse llevar y a fluir, que denota falta de confianza o falta de fe en los demás o en la vida, según el caso.
E inseguridad y miedo a los cambios. Pues estos implican abrirse a conocer nuevas cosas, oportunidades, personas, etc., y salir de esa zona de confort, de ese “universo conocido” que ya uno controla y le da seguridad.
Y más allá de este miedo, de la desconfianza y de la inseguridad quizás se encuentre el apego a lo que uno cree que es y tiene, o sea, el apego al “personaje” y a lo que “cree poseer” ahora. Con el consecuente miedo a perderlo.
Y ¿por dónde abordar y empezar a manejar este factor psicológico para reducir el estrés que causa? Te hablaré de ello en un próximo artículo.
Mientras, dime: ¿se te ocurre algo que puedas hacer? Si es que sí y también si quieres dar tu opinión, te invito a que lo compartas en los comentarios aquí abajo.
Muy interesante ,muchas gracias por compartirlo conmigo, un beso,
¡Muchas gracias, Carlota!